Fornicación,
[Comentario / Reflexión 1ª Corintios 6:13-20]
[Segunda Lectura Dominical]
El Apóstol San
Pablo es claro en esta carta a los Corintios, este pueblo vivía cómo vivimos
nosotros, nuestra humanidad, en estos tiempos, en un libertinaje que se ha
encargado de vivir bajo el subsuelo de la religión; la religión le ha dado la
pauta al libertinaje, el libre albedrio del hombre se ha revestido de la
decisión alejada del verdadero sentido de la práctica religiosa y por ende de
las practicas de la caridad (el amor) se ha sustituido el amor por la
tolerancia. Por esta razón la lectura de esta carta se ajusta a nuestros
tiempos.
El cuerpo es el
templo del Espíritu Santo, no nos pertenece, la falsa idea de que “yo soy quien
soy” y “lo que haga con mi cuerpo a nadie le interesa” es un fetichismo
enclavado por satanás en las mentes de los ignorantes de espíritu; el oleaje de
la modernidad a la par de las practicas vanidosas empujan la voluntad humana al
culto al cuerpo y a dedicarle horas al ejercicio físico para deshacernos de lo
que el pecado de la gula nos ha regalado. La falsa identidad de los que se
hacen implantes en el cuerpo, o cambian de sexo, o se tatúan abominaciones es
parte de esa ofensa al Espíritu Santo.
Como dice la
palabra, todos los pecados son fuera del cuerpo, pero el de fornicación es del
interior y espiritual; ya que al tener coito una pareja la carne queda unida y
en la transferencia de líquidos del hombre a la mujer va la vida y además de
fornicar en caso del uso de métodos anticonceptivos también va el asesinato o
aborto anticipado.
En la unión de una
mujer con un hombre, en la unión carnal, existe un misterio espiritual que aún
el hombre no lo ha descifrado, y está lejos de hacerlo o lograrlo, cuando un
hombre convive carnalmente con una mujer ambos son uno solo, dentro y fuera del
lecho, ese misterio Divino de la unión espiritual que deviene de la unión carnal.
Al infierno están yendo muchas almas, sino todas, por los pecados de impureza sexual, que incluye autocomplacencia, infidelidad, sodomia, etc; el culto a la carnalidad
alimentada por lo "light" o aceptación social con que estos temas son presentadoslos en los medios de comunicación permiten que los humanos desde
pequeños nos mentalicemos que el sexo es un asunto como comer o estornudar, algo
simple, que no conlleva ningún efecto el tener relaciones prematuras antes del
matrimonio o en unión libre como “noviazgo” o de lo moderno “amigos con derecho”.
Incluso el sexo no
es el centro de la unión matrimonial, sino que él centro de la unión matrimonial
es ejercer un sacramento compartido para adorar y alabar al Señor, y en su
momento propagar la raza humana; pero bajo condiciones espirituales Divinas.
Viviendo en la
pareja matrimonial deben vivir como solteros y buscarse solamente cuando ya la
capacidad de aguante se agota y esto para evitar cometer pecados de impureza
sexual de infidelidad [1ª Corintios 7:29. Os digo, pues, hermanos: El
tiempo es corto. Por tanto, los que tienen mujer, vivan como si no la tuviesen.]
[1ª Corintios
7:1-5. En cuanto a lo que me habéis escrito, bien le está al hombre abstenerse
de mujer. No obstante, por razón de la
impureza, tenga cada hombre su mujer, y cada mujer su marido. Que el marido dé
a su mujer lo que debe y la mujer de igual modo a su marido. No dispone la
mujer de su cuerpo, sino el marido. Igualmente, el marido no dispone de su
cuerpo, sino la mujer. No os neguéis el uno al otro sino de mutuo acuerdo, por
cierto tiempo, para daros a la oración; luego, volved a estar juntos, para que
Satanás no os tiente por vuestra incontinencia.].
La fornicación con
una servidora sexual o en promiscuidad, es un pecado mortal que debe ser
confesado, cumplir la respectiva penitencia y hacer voluntad de no volver a
cometerlo. Es parte de la lucha y del crecimiento espiritual abstenerse, la tentación en estos tiempos de redes sociales esta disfrazada de belleza y palabrerias envolventes que elevan el ego de los que participan en ese juego y al final el goce es el fin de algunos en este juego de ganarse el infierno o el cielo.
El mundo actual
gira alrededor de conductas sexuales, la mujer y el hombre hemos perdido el
sentido de la unión de las parejas y sí fuésemos un poquito espirituales; la
vida dedicada en la unión matrimonial fuere para adorar al Señor y servirle al prójimo
a través de dicha unión, el mundo fuese otro, y la pobreza material fuera muy
poca y un asunto del que no se valdría satanás para meternos en la lucha de
clases, de ricos y pobres.
satanás es astuto y se vale de la belleza, del
dominio de los cinco sentidos y de lo precario que es nuestra fe para
sobrevivir a las tentaciones y nos guía a una conducta tolerada por la sociedad
que facilita el paso al infierno pero difícil para aspirar a la vida eterna en la Iglesia Triunfante.
Amén.
Ave María Purísima. Sin Pecado Concebida.
Ave María Purísima. Sin Pecado Concebida.
Ave María Purísima. Sin Pecado Concebida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario